Desiderata desembarcó con una colección 2010 super femenina


En una esquina super transitada (Santa Fé y Callao), en un día casi de verano, las modelos bajaron de un micro doble decker con valijas, para ingresar a un local enorme que estallaba de gente y mostrar la nueva colección de la marca. En esta primavera verano 2010, l
as modelos, entre ellas las top Milagros Schmoll (hasta el invierno era la cara de la campaña de la marca) y Romina Senesi, mostraron los cuatro ejes que propone la marca para esta temporada: Pretty Liberty, Etno Chic, Nautic Ideology y Utilitario Minimal. Pero eso no es todo: una vez finalizado el desfile, las modelos continuaron su paseo por la ciudad en el bus, super llamativo para los transeúntes de la Avenida Santa Fe.

¿Qué me gustó más? Los vestidos, ya un clásico de Desiderata. Las estampas, y el blazer que protagoniza la campaña. Hermosa una pollera coral calada. Con un eje romántico y femenino, hubo prendas vaporosas, con vuelo, superposición de volados, géneros livianos, estampas florales y de la naturaleza. Una de las claves: la seda.


Estas son las 4 líneas que trabajó la firma:

Pretty liberty:

Estampas florales que recrean un universo fresco, joven y de colores suaves como rosa y celeste y que invaden camisas, vestidos, minifaldas y accesorios.

Etno chic

Estampados que evocan África, Marruecos, India y Japón acompañan en caftanes combinadas con baggys, bermudas y shorts de lino. Lo exótico conoce la metrópoli.

Nautic ideology

La estética Marine viene con todos sus códigos: rayas, tizados, pantalones de doble abotonadura e iconografía marina (sogas, anclas, etc). Como siempre, azul, rojo y celeste son la combinación más frecuente, que reaparece en prendas y accesorios.

Utilitario minimal

Minimalismo noventoso. Piezas básicas que renuevan sus estructuras y proporciones: las texturas tienen lustre levemente satinado en las gamas del azul, gris, celeste y blanco. El blazer se maximiza y los puños se vuelven rebatibles (no hay chance de usarlo como siempre lo usamos) y hombreras que definen la nueva silueta “T”, que este año apenas asoma pero que se profundiza en las próximas temporadas (así que acostúmbrese, chicas). Las camisas se convierten en vestidos chemise.