Ya las conté en otro post que el gobierno sancionó que los super deben entregar bolsas ecológicas, que se biodegraden en unos meses... Y que pronto los almacenes y los super más chicos también van a tener que adaptarse a esta normativa, pero con el furor de las eco-bags (cada vez son mas lindas, por otra parte), vuelve otro objeto maravilloso y bien argentino: el changuito de las compras. Y si... sepanlo, está de moda.En los barrios más chic de Buenos Aires no sorprende ver mujeres jóvenes con sus changuitos, iguales a los que arrastraban nuestras madres y abuelas para ir al almacén del barrio, mucho antes de las grandes cadenas de supermercados; pero son nuevos, relucientes y super glam. Hay changuitos estampados, con flores, con rayas blancas y negras, lunares. De hecho ya hay marcas que se dedican a producirlos.
Violraviol, de la diseñadora Celicia Sonzini, es una de ellas (la primera foto es cortesía Violraviol). Inspirada en los objetos de uso cotidiano de hace años, decidió rescatarlos del olvido y volver a producirlos. Se dedica a los changuitos, pero también hace delantales, manteles, canastas para hacer las compras (de tiras de plástico trenzadas), individuales y almohadones. Y son todos muy lindos, realmente.
Les muestro algunos modelos de Violraviol:
Sus productos se venden en locales de Palermo, Barrio Norte, Almagro y en algunas ciudades del interior del país, como Rosario y Villa La Angostura. Les dejo el sitio para que vean los delantales y las canastas, que me parecen hermosas: Violraviol.comEn el otro extremo, la empresa española Rolser llegó con mucho ímpetu y una campaña que dice: "No somos un changuito, somos mucho más que eso. Somos tendencia, somos diseño, somos buen vestir, somos vanguardia, somos ecología, somos salud, somos útiles, somos innovadores, somos modernos".
Se trata de una firma con más de 40 años de experiencia en el mundo que adaptó su diseño a la actualidad y le sumó un toque de tecnología y diseño: ruedas más grandes y resistentes. Un clásico actualizado a las necesidades actuales.
Así que les muestro los dos extremos: una gran empresa con años de experiencia y un proyecto de rescate emotivo, independiente y autogestionado, en una especie de movida retro-hogareña bien argentina, por el el regreso al barrio, a la idea de "hacer los mandados". Elegí la que más te cierre.Fotos: cortesía Violraviol y Rolser.